Uno de los factores más importantes en el envejecimiento de la piel de las manos es el sol. Los factores ambientales: como aire frío y seco del exterior y la calefacción de los interiores puede reducir la hidratación de la piel. Con la edad las glándulas sebáceas se vuelven menos activas, las duchas y baños frecuentes con agua caliente así como enjabonarse con jabones que contienen colorantes y fragancias pueden resecar la piel de las manos aun más. La piel pierde su elasticidad y ternura, disminuye su grosor, aparecen las manchas…
El tratamiento del rejuvenecimiento de las manos se puede realizar mediante uno de siguientes tratamientos, según la necesidad del paciente. Se puede también utilizar la combinación de los tratamientos.